Resumen
La certificación y la recertificación profesional son procesos fundamentales que garantizan la competencia continua de los médicos y la seguridad de los pacientes. Sin embargo, la presencia creciente de las redes sociales en la vida profesional ha originado una tendencia preocupante: la percepción de que la visibilidad digital puede sustituir los procesos formales de recertificación. Este artículo explora los fundamentos conceptuales y éticos de la certificación y recertificación, los responsables de su implementación, los estándares internacionales y los riesgos de confundir popularidad digital con competencia médica. Se revisan experiencias de Estados Unidos, Europa y Latinoamérica, y se argumenta la urgencia de consolidar sistemas de recertificación basados en competencias, alineados con estándares internacionales y con los nuevos modelos educativos promovidos por sociedades científicas. La visibilidad digital puede complementar, pero nunca reemplazar, la acreditación profesional.
El caso
Durante una reunión nacional de planificación académica orientada a mejorar los programas de educación médica continua, un director académico de una institución privada con convenio universitario expresó:
“La recertificación o el proceso de mantenimiento de la competencia profesional del médico, y en particular del cardiólogo, hoy día se establece a través de los perfiles en redes sociales como Instagram. La imagen corporativa o individual en estas plataformas es lo que lo certifica.”
Esta afirmación desató un intenso debate entre los asistentes y planteó la pregunta central:
¿Puede la imagen digital sustituir los procesos formales de certificación y recertificación profesional?
Competencia profesional: definición y pilares
La competencia profesional es la integración dinámica de tres dominios:
- Conocimientos científicos y razonamiento clínico, actualizados y basados en la mejor evidencia disponible (1).
- Habilidades técnicas y procedimientos especializados, que requieren entrenamiento constante.
- Valores, ética y profesionalismo, indispensables para tomar decisiones en beneficio de los pacientes (1).
La competencia no es estática; debe desarrollarse y evaluarse de manera continua. Este principio da origen a los mecanismos formales de certificación y recertificación.
Certificación y recertificación: definiciones formales
- Certificación: reconocimiento académico y legal otorgado por una universidad o institución acreditada que avala que un profesional ha completado la formación requerida para ejercer una especialidad (2).
- Recertificación: proceso periódico y reglado mediante el cual las sociedades científicas y organismos reguladores verifican que el profesional mantiene actualizadas sus competencias técnicas y éticas y cumple estándares exigidos por su especialidad (2,3).
Estos procesos son parte del concepto más amplio de mantenimiento de competencias, que implica educación médica continua, autoevaluación, investigación, aprendizaje en servicio, auditoría clínica y revisión por pares (1,4,5).
¿Quién certifica y recertifica?
- Certificación inicial: corresponde a universidades, hospitales universitarios y programas académicos acreditados.
- Recertificación periódica: es responsabilidad de:
- Sociedades científicas y consejos de especialidad.
- Federaciones y colegios médicos.
- El Estado, como ente regulador para garantizar transparencia y equidad (3).
En algunos países se han establecido organismos nacionales de certificación y recertificación con carácter interinstitucional.
Estándares internacionales
Estados Unidos
El American College of Cardiology (ACC) y la American Heart Association (AHA) han desarrollado los COCATS (Core Cardiovascular Training Statements), que establecen competencias en 15 áreas y definen niveles de aprendizaje (4).
El American Board of Internal Medicine (ABIM) implementa el programa Maintenance of Certification (MOC), que exige:
- Práctica clínica activa.
- Educación médica continua documentada.
- Evaluaciones periódicas cada 10 años o modulares anuales (5,6).
Europa
La European Society of Cardiology (ESC) ofrece certificaciones en subespecialidades (ecocardiografía, intervencionismo, arritmias, cuidados agudos), con vigencia de cinco años y recertificación basada en práctica continua, EMC y auditorías (7).
España
La Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias ha permitido modelos mixtos que integran créditos de EMC, auditorías, portafolios y evaluación de desempeño (2).
Latinoamérica
- Argentina: sistema basado en créditos y participación en actividades científicas, con examen teórico si no se alcanza el puntaje mínimo (8).
- México: examen teórico-práctico cada cinco años y acreditación de la práctica activa (9).
- Chile y Uruguay: sistemas nacionales obligatorios o voluntarios con recertificación periódica, integrando auditoría externa, portafolios y créditos acumulativos (10,11).
La amenaza de la “recertificación digital”
El uso de redes sociales por parte de los profesionales de la salud ha crecido en la última década. Aunque son herramientas útiles para difundir información médica y conectar a la comunidad, las métricas digitales (seguidores, “likes”, interacciones) no son indicadores de conocimientos ni de competencias clínicas.
Este fenómeno, conocido como “ilusión de competencia digital”, se relaciona con el efecto Dunning-Kruger, en el cual la ausencia de evaluaciones objetivas lleva a una sobreestimación de las capacidades (5).
Discusión ética y académica
Aceptar que la presencia en redes sociales sustituya los mecanismos formales de recertificación tiene consecuencias graves:
- Debilita los estándares de calidad y seguridad.
- Erosionaría la confianza de la sociedad en los mecanismos de acreditación.
- Favorece la mercantilización de la práctica médica, desplazando el profesionalismo por el marketing personal.
La visibilidad digital puede complementar la proyección académica, pero no reemplaza la acreditación institucional, objetiva y transparente (3).
El nuevo modelo educativo: un cambio de paradigma
La Sociedad Venezolana de Cardiología (SVC) ha propuesto un cambio radical en el modelo educativo (12,13,14):
- De la educación pasiva a la educación basada en competencias y resultados.
- Creación de un sistema de desarrollo profesional continuo que combine actividades presenciales y virtuales, aprendizaje interactivo y evaluación sistemática.
- Integración con universidades y centros de investigación para garantizar el impacto en la práctica clínica.
Este modelo, que incluye un sistema sostenible de recertificación, busca transformar la EMC en una herramienta efectiva para mantener la competencia profesional, superando la cultura de las conferencias magistrales de bajo impacto (13).
El enfoque por competencias en los programas de posgrado en cardiología ha sido descrito recientemente como un modelo aplicable al contexto nacional e internacional, alineado con estándares de formación y evaluación continua (14).
Estrategias recomendadas
- Fortalecer los sistemas nacionales de recertificación.
- Integrar la alfabetización digital como competencia complementaria, sin sustituir los procesos formales.
- Alinear los modelos educativos con estándares internacionales.
- Comunicar claramente a la sociedad que la recertificación es un proceso objetivo y académico, no una validación digital.
Conclusiones
La recertificación profesional es un proceso complejo y estructurado que garantiza la seguridad del paciente y la calidad asistencial. La visibilidad digital puede ser un complemento valioso, pero no sustituye la formación académica, la actualización científica y la evaluación objetiva de competencias.
Fortalecer los sistemas de recertificación y adoptar el nuevo modelo educativo por competencias son pasos esenciales para evitar la trivialización de la acreditación profesional.
Referencias
- Epstein RM, Hundert EM. Defining and assessing professional competence. 2002;287(2):226–35.
- Pardell H. ¿Es oportuno introducir la recertificación de los médicos en España? Med Clin (Barc). 2005;124(9):344–7.
- Álvarez E. La certificación y recertificación médica. Rev Venez Cir. 2013;66(1):32–4.
- Halperin JL, Williams ES, Fuster V. COCATS 4: Training in adult cardiovascular medicine. J Am Coll Cardiol. 2015;65(17):1721–64.
- Brush JE Jr, Oetgen WJ. Maintenance of competence in cardiovascular training and practices: worth the effort? Methodist Debakey Cardiovasc J. 2020;16(3):199–204.
- Beliveau ME, Nishimura RA, O’Gara PT. Physician competence: a perspective from the practicing cardiologist. Methodist Debakey Cardiovasc J. 2014;10(1):50–4.
- Popescu BA, Andrade MJ, Badano LP, et al. EACVI Certification Programmes. Eur Heart J Cardiovasc Imaging. 2015;16(7):711–3.
- Sociedad Argentina de Cardiología. Recertificación profesional continua. Rev Argent Cardiol. 2016;84(1):6–8.
- Consejo Mexicano de Cardiología. Normas para la certificación y recertificación. Ciudad de México; 2022.
- Nazzal O. Certificación y recertificación de especialidades médicas. Rev Chil Dermatol. 2014;30(1):8–9.
- Torres Calvete J. Certificación-recertificación profesional médica. Rev Med Urug. 2014;30(1):5–7.
- Núñez-Medina T. El nuevo modelo de desarrollo profesional continuo: Parte I. Avances Cardiol. 2015;35(3):145–6.
- Núñez-Medina T. El nuevo modelo de desarrollo profesional continuo: Parte II. Avances Cardiol. 2015;35(4):205–8.
- Núñez-Medina T. Postgrados de cardiología en Venezuela bajo el enfoque de competencias. Instituto Educardio. Disponible en: https://institutoeducardio.net/postgrados-de-cardiologia-en-venezuela-bajo-el-enfoque-de-competencias/